jueves, 1 de septiembre de 2016

canasta

me corresponde tal vez el éxito absoluto
o hasta el fracaso total:
nunca ya las medias tintas 
del trabajo duro y diario.
porque siempre pasa esto
(y uno nunca aprende)
que la gente se te acerca 
como amiga a conversar,
a decir que se alegran de tu felicidad
pero que necesitas estabilidad
y un trabajo de verdad,
porque no quieren que un día
vayas a morir de hambre,
porque no vas a vivir
de hacer lo que ahora haces,
porque están muy preocupados por tu vida
y por la vida
de los veinte hijos que todavía no tienes
pero que debes tener para encajar,
que debes dejar de soñar
y poner los pies en la tierra,
entender que el mundo está allá afuera
y que no vas a lograr nada
si no matas a tus sueños
y los cambias por un trabajo "normal".
después de eso me sonríen 
y me preguntan por mi plan
¿mi plan? 
mi plan es ir a comprar una canasta
para poner los limones
que me van a caer del cielo.
porque a veces se me olvida
que es la gente la que está confundida
y espera de más
de este idiota
mal poeta
que viene a escribir poesía
entre tantas maldiciones
y luego quieren que sepa

cómo ubicarse en la vida.